Estamos en El Pino, al lado de Felechosa, en Aller, con
un pronóstico del tiempo nada favorable; viento fuerte, cota de nieve a 900
metros bajando a 700 … Por eso nuestros compañeros decidieron no salir. Pero
para hacer algo, aunque sólo sea caminar hasta que nos coja la lluvia –yo llevo
un paraguas en la mochila- o si está muy malo bajar pronto a comer a algún
chigre de por aquí.
Y empezamos a
caminar hacia las Foces de río Pinos porque en principio el plan de nuestros
compañeros era subir a Peña Redonda por la canal norte que es atractiva en
invierno si hay nieve dura.
Cruzamos el
puente junto al molín de Peón, antigua minicentral hidráulica y ahora
aprovechada para criadero de alevines de trucha por una asociación de
pescadores. Avelino que es pescador comenta que como dicen ellos, los
pescadores de río, crían “alimento para los cormoranes y las garzas”.
Y así charlando
vamos acercándonos al inicio de las Foces hasta llegar a la parte más estrecha,
cruzando el puente de madera para entrar en ellas con el rugido del caudal que
lleva por el deshielo.
Cruzamos este precioso tramo del desfiladero
encajonado con el río a un lado y el camino empedrado al otro hasta llegar a la
apertura del valle del Fondíl.
En la bifurcación señalizada habíamos tomado a la
derecha para subir a Peña Redonda en un bonito día del otoño pasado. Hoy vamos
a seguir el ramal de la izquierda, posiblemente hacia Caniella; o quizás hacia la Peña Melera , ya
veremos.
Frente a nosotros, en un prao, dos rebecos pastan tranquilamente |
La Peña Redonda |
Y la decisión es seguir hacia Caniella, a ver cómo nos
encontramos la nieve, ya que de momento el día está acompañándonos: no llueve,
no hace demasiado viento ni demasiado frío, …
Las Cuevas |
Pasada la zona de
Las Cuevas llegamos al bosque de hayas donde encontramos la nieve algo blanda
ya; para poder avanzar bien aprovechamos que por el deshielo se forma un regato
libre de nieve por donde es más cómodo caminar. Y es que como no contábamos con
poder hacer gran cosa dejamos en casa raquetas de nieve, crampones, piolets …
Y claro vamos a
echar de menos los utensilios, porque a medida que vamos subiendo más, la
nieve está más dura, y más arriba, ya llegando a Caniella por el vallecín por el que vamos está más que dura, completamente helada.
La loma hacia la Cabritera |
Llegamos a
Caniella con el viento soplando ya fuerte por esta zona y vemos que no podemos
seguir al pico de La
Cabritera que era el objetivo final si todo hubiese sido favorable.
Pero está claro que sin crampones y piolet en invierno y desde esta altura de
más de 1500 m sería imprudente subir a los 1913 m de La Cabritera sin la
“ferramienta”.
Comemos algo de pie, protegidos del viento por un
lateral de una cabaña y para hacer provechoso el día decidimos pasar de este
valle de Caniella al valle del Fondíl, bajo Peña Redonda y así pasamos por la
majada de Palmián, una de las más guapas no sólo del concejo de Aller, sino por
el sitio donde está, de las más guapas de Asturias.
Y de camino allá
volvemos la vista atrás para ver cómo está de cargada de nieve la línea de la Cordillera , destacando
de la zona de Vegarada la
Puerta de Faro ...
... y los picos de
En cambio hacia nuestro Norte tenemos el cordal de Aller, con el Cuchu, la Forada … sin apenas nieve.
Y en Palmián posamos para foto porque ¡menuda vista desde aquí, con Peña Redonda, los
paredones de la Peña Panda
y la nieve!.
Majada Palmián |
Desde aquí
tenemos también una buena vista hacia el Cuchu y la Forada ; aparecen también el
Retriñón y la Muezca.
Y dejamos atrás La Cabritera ; de haber
sabido que el día nos daba esta tregua de buen tiempo y si hubiésemos traído
los crampones hubiésemos subido a ella, dando vista al valle de Río Aller y a
Vegarada. ¡Qué pena, pero el recorrido de hoy también nos va a resultar muy
satisfactorio!
Y nada, una vez
bajado de la zona de nieve a disfrutar de la bajada tranquilamente, sin prisas,
porque es pronto y aún llegaremos a tiempo abajo … ¡hay alguno de nosotros que
lleva todo el día hablando de” cabritu con patatinos” o de “caldereta de
corderu” o sea que ¡algo habrá que hacer!.
Pasamos bajo la Peña Redonda y vemos con detalle la canal con la nieve acumulada que habría sido el objetivo de nuestros compañeros hoy.
Otra opción que
teníamos por la mañana era subir, en vez de en dirección a Caniella, en
dirección a la collada Cavera para subir a Los Pandos o a la Peña Melera , que vamos
viendo ahora al bajar. La anoto para tenerla en cuenta para alguna ocasión,
quizá pronto.
Y nada, bajada
por las Foces, luego la pista y la bajada al pueblo del Pino de donde salimos.
Allí pedimos
consejo a un paisano (“donde fueres haz lo que vieres”,
dice el refrán) y así en Felechosa, a las 3 y media, una buena hora para comer
después de esta actividad, nos enfrentamos con cuchara y tenedor a sopa, fabada
y cordero y un buen postre casero para acabar.
Y ¡claro que nos acordamos de
nuestros compañeros que no salieron de monte porque el tiempo daba malo!.
¡Ja,
ja, ja! ¡Otra vez será, collacios!
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